Las superficies oscuras absorben más luz solar que las superficies claras y, por lo tanto, acumulan calor rápidamente. El objetivo de los IR Reflecting Pigments es maximizar la reflectividad solar de una superficie recubierta y minimizar el calor y sus efectos negativos sobre la superficie.
La reflectancia IR se logra mediante la retrodispersión física de la radiación a través de las partículas de pigmento, contando Irisem con un catálogo de colores de 13 dispersiones pigmentarias adecuadas para esta aplicación.
Así esta gama mitiga la acumulación de calor en superficies pintadas como paredes, fachadas y tejados. Por tanto, tiene un impacto considerable en la reducción de la temperatura interior de los edificios y, por consiguiente, de los costes de energía, durabilidad de los materiales, estrés térmico e impacto en el medio ambiente.
¡Prueba nuestra gama de pigmentos reflectantes del infrarrojo y disfruta de sus ventajas!